martes, 30 de junio de 2015

¿Cómo se desarrolla el razonamiento y el pensamiento creativo en los estudiantes universitarios?


Desarrollo y el Pensamiento Creativo.....¿Están matando las escuelas la creatividad de los estudiantes?

Los invito a observar el siguiente video:




Históricamente, la creatividad ha sido vista como un proceso tortuoso y místico, un lugar de genios, artistas y excéntricos.


Ahora bien, para Cropley (2001) la creatividad es reconocida como una habilidad práctica, algo que se puede enseñar, y que todo el mundo puede lograr. Es una manera de pensar en lo que vemos, las cosas familiares con una mirada fresca, examinar un problema con una mente abierta acerca de cómo podría ser resuelto y, el uso de nuestra imaginación, en lugar de nuestro conocimiento para explorar nuevas posibilidades.




 Mi definición de pensamiento creativo...

El concepto de creatividad ha sido sinónimo de originalidad, novedad, transformación tecnológica y social, ingenio, éxito y prestigio, por dar algunos ejemplos, sin embrago, el constructo creatividad es la capacidad de crear cosas nuevas, valiosas, que tengan un sentido y, que logren, en el individuo interiorizar el aprendizaje y el conocimiento que tuvo para realizar la creación, por ende, existe un alto grado de capacidad cognitiva y actitud de las personas.

Características del Pensamiento Crítico-Creativo

Fuente: Elaboración propia en base a Cropley (2001)


A la luz de la creatividad, el razonamiento es el procedimiento correcto que va de las premisas a las conclusiones, es decir, razonar significa llegar a las conclusiones acertada (McShane, Gillis,y Benton, 2011).








Diferencias entre la creatividad y la Inteligencia

Es claro entre la creatividad y la inteligencia existe una gran diferencia, ya que se pensaba asumido que las personas creativas eran también personas inteligentes. Sin embargo, se puede asumir que una persona es creativa e inteligente y viceversa, ya que si una persona es inteligente, también, es creativa.


Wallach y Kogan (1965), citados por Cropley (2001) afirman al igual que se puede demostrar la existencia de diferentes grados de aptitud cognitiva o inteligencia, también se pueden establecer niveles de creatividad, pero como algo independiente de la inteligencia, y que con justicia se puede llamar creatividad.  

En tabla N°1 se pueden observar con más claridad la diferencias entre creatividad e inteligencia.




¿Cómo desarrollar la creatividad y el razonamiento en los alumnos?

El desarrollo de la creatividad y el razonamiento en los estudiantes implica varios rasgos tales como: el trabajo real en una dirección (profundo), la flexibilidad (alternativas), independencia, motivación, defensa de criterios, etc. Valdés y Rey (2009) externan que objetivo de lograr un razonamiento y, al mismo momento, potencializar la creatividad en el aula, se debe contar con criterios sólidos, dinámico, flexible, original, imaginativo, tenaz, agudo en sus observaciones y poseer una curiosidad insaciable.


Fases:







   Fuente:Fuente: Valdés y Rey (2009)


Actividades a desarrollar el aula:

El test de Raven: mide a través del razonamiento visual-perceptual, razonamiento analógico y razonamiento lógico. 

Se trata de un test no verbal, donde el sujeto describe piezas faltantes de una serie de láminas pre-impresas. Se pretende que el sujeto utilice habilidades perceptuales, de observación y razonamiento analógico para deducir el faltante en la matriz.


El test de Dominó también llamado D48 es una prueba de inteligencia no verbal y fue creada por el psicólogo inglés E. Anstey Mide el factor G (capacidad de inteligencia general) en función de las facultades lógicas.



Realizar Crucigramas:



La Observación:  el individuo examina de acuerdo a su interés y pericia, una situación u objeto para detectar sus atributos, cualidades, propiedades o características.





Comparación: permite establecer relaciones de semejanza o diferencia, bajo este criterio o variable, entre objetos, situaciones, hechos o personas.



La clasificación: es un proceso mental y de razonamiento que permite agrupar personas, objetos, eventos o situaciones con base en sus semejanzas y diferencias, es una operación de conocimiento fundamental. 




Secuencias: es una sucesión de elementos organizados de acuerdo con los valores de una o más variables, las características de elemento guardan una relación conocida con las características de los elementos precedentes y siguientes.




Referencias:

Cropley, A. (2001) Creativity in Education & Learning. England: Routledge. p. 4-162

McShane, P., Gillis, D. A., y Benton, J. (2011). Introducción al pensamiento crítico. México: Plaza y Valdés, S.A. de C.V.

Valdés, R. M. C., Rey, R. A. (2009). La creatividad y su desarrollo en el campo pedagógico. Argentina: El Cid Editor 

miércoles, 17 de junio de 2015

Pensamiento Crítico y Reflexivo en la Educación


El pensamiento crítico y reflexivo en la educación hace que los estudiantes cuenten con habilidades que los hagan alumnos más holísticos, por ende, logran desarrollar un pensamiento más abierto al cambio. 

http://www.slideshare.net/msotoc/pensamiento-reflexivo-y-crtico-en-la-educacin

miércoles, 10 de junio de 2015

Artículo de Opinión


La Compresión como base Fundamental del Pensamiento Crítico y Creativo en el aula


Por Marco V. Soto Calderón
Estudiante de la Maestría en Currículum y Docencia Universitaria
ULACIT






La capacidad de comprender y el como interiorizamos lo aprendido nos ha acompañado durante toda nuestra existencia y representa una de las expresiones más significativas y creativas del conocimiento humano, es decir, es través de ella que logramos entender las distintas ramas del saber humano tales como la ciencia, la tecnología, el arte, las ciencias sociales desde nuestra misma formación antropológica, histórica y sociocultural; sin embargo, no siempre adquirimos las suficientes habilidades y destrezas de comprensión, no todos comprendemos de la misma forma y al mismo tiempo y nivel, debido a que los sistemas educativos y las distintas metodologías pedagógicas no nos aseguran o logran ese objetivo, o bien, no tuvimos la suficiente motivación personal y social para asumir con éxito el reto, propiciando y asumiendo deficiencias en una educación que debería ser de calidad, pertinente y significativa.

Cuando se habla de comprender, implícitamente se está refiriendo a aquello que es comprendido o entendido. ¿Pero qué es lo que comprendemos? ¿Cómo saber y tener la certeza que nuestros estudiantes ha entendido la materia vista en la clase? Muchos pedagogos y educadores aseguran que lo que uno comprende es un contexto de una realidad, o, por lo menos, una parte de ella; no completa. De ahí que, el concepto de comprender es muy polisémico, cada docente, formador o bien los mismos aprendices divagan en su entendimiento y tratan de localizar su significado en un vasto universo de definiciones y analogías, Jaramillo, Escobeto y Bermúdez (2005) plantean su hipótesis al afirmar que comprendemos un proceso cuando contamos con una teoría que nos permite orientar nuestra acción en relación con ese proceso en forma exitosa.

A causa de ello, como docentes nos dificulta lograr crear espacios propicios en el aula, donde la comprensión sea el centro del aprendizaje, debido que el sistema educativo está cambiando y, en muchos casos, los estudiantes están siendo guiados a asimilar lo comprendido en un corto período de tiempo; restando y en muchos casos castrando un proceso docente-educativo real y vivencial ,donde el uso de los métodos de enseñanza innovadores sean destinados a  la formación del pensamiento creador y crítico en los educandos.

De ahí que, cada vez cobra fuerza en la educación superior costarricense el uso de nuevos enfoques metodológicos, una enseñanza capaz de dotar a los estudiantes la posibilidad para que aprendan a aprender y aprendan a pensar, buscando en mayor medida las potencialidades del pensamiento valorativo, comunicativo y creativo; es así, como la Enseñanza para la Compresión (EpC) surge como respuesta a un problema muy latente es nuestros salones de clase, la gran mayoría de los alumnos que se gradúan de la educación superior, lo hacen sin haber comprendido lo que aprendieron, realizaron exámenes y los respondieron sin comprender la esencia del problema,  memorizaron los contenidos de las distintas asignaturas sin analizar a profundidad su verdadera razón, pues, argumentan sus posiciones sin ninguna validez y posición crítica, ya que estuvieron enfrascados bajo un modelo conductista-memorístico que no tuvo la capacidad de lograr desarrollarles ese espíritu lógico, creativo e inteligencia innata, así como nunca consideró los conocimientos previos que cuenta todo ser humano.

En este sentido, muchas de esas prácticas, por no decir todas, poco eficientes en la compresión cognitiva, son en gran medida responsables y coautoras del estancamiento que caracteriza al sistema educativo en nuestro país, así como la gran brecha existente entre la educación urbana y rural, de ahí la necesidad apremiante de lograr que a través de la EpC el sujeto que aprende  y desaprende logre desde una óptica creativa y critica y, mediante el desarrollo de una simbiosis docentes-estudiantes, rentabilizar al máximo su conocimiento, tratando de dar respuesta a una de las preguntas básicas ¿qué quiero que mis alumnos aprendan? La EpC al ser un modelo pedagógico cuyo propósito es diseñar y dirigir las prácticas del aula que promuevan la comprensión [el desarrollo crítico y creativo] y la reflexión de la misma (Blyte, 2010).

La búsqueda de respuestas cuyo objetivo es lograr que los aprendices sean cada vez más autocríticos y creativos, va a depender en gran medida de una buena retroalimentación por parte del docente y de sus mismos compañeros, la gran misión en nuestras aulas y la incursión de sistemas educativos novedosos y pertinentes, deben de lograr en los alumnos desarrollar un modelo crítico y creativo, por el siempre hecho que los jóvenes de hoy aprenden de manera diferente, y esto hay que valorarlo, respetarlo y facilitarlo.

En conclusión, una de las causas por el cual la creatividad y el pensamiento crítico es muy escaso en los centros educativos, a los estudiantes no se les exige pensar y resolver problemas, a mi juicio, son evidencias de que muchos docentes tienen escaso dominio en las herramientas e instrumentos para enseñar a pensar y para evaluar el pensamiento de sus estudiantes, un alto número de profesores mantienen prácticas muy arcaicas y tradicionales, donde prevalece la transmisión de conocimientos solamente y, se olvidan, de ser los facilitadores en brindar las estrategias necesarias para que sus alumnos logren desarrollar aprendizajes para pensar.     
Referencias

Blyte, D. (2010). La enseñanza para la compresión: guía para el docente. Buenos Aires: Editorial Paidós.

Jaramillo, R., Escobedo, H., y Bermúdez, Á. (2005). Enseñanza para la comprensión. Venezuela: Red Revista Educere.